domingo, 6 de marzo de 2011

Carta a mi gran y querida amiga, Agus

Algo que escibí hace unos meses, aunque no pensaba mostrarlo, ni menos publicarlo... 

Hay cosas que uno no puede evitar, por más que intente. Todos cometemos errores, algunos más graves que otros, si, mas no se puede pretender la perfección –y puedes confiar en que lo digo por experiencia, ya que varias veces el perfeccionismo me ha llevado únicamente a la frustración de que no todo saliera como lo había planeado-. Lo que cambia es la forma en la que reaccionamos ante tales inconvenientes. Por supuesto, no puedes esperar que una simple adolescente, con todas las inestabilidades psicológicas típicas de la edad, actúe siempre de la mejor manera. Ahora que lo veo a distancia, entiendo que tengo gran parte de la culpa de que no pudiéramos entablar una sencilla conversación, sin terminar discutiendo, o maldiciendo, o incluso derramando lágrimas. Y es cierto también que muchas veces tenías razón en lo que decías -aunque en ese momento no lo admitiera-, pero ¿A quién le gusta que le echen en cara todos los defectos que tiene? Bueno, ya, suficiente introducción, sé que hice y dije cosas terribles, muchas veces crueles, y te pido disculpas por eso, mas no podía hacer otra cosa, mi reputación e imagen estaban en juego. Si, lo sé, sé lo hipócrita que suena eso, teniendo en cuenta que nunca me importó lo que pensaran los demás de mi, pero justamente esa era la apariencia que tenía que mantener: Que todo me importaba un bledo ¿Irónico, no? Pero aún así, esa era mi forma de pensar en ese entonces. Muy probablemente era para llamar la atención.
No puedes negar de todos modos, que eras tan inmadura como yo, aunque en distintos aspectos, por supuesto. Tú en una forma más aniñada, pensando que ser responsable, poner al colegio como lo más importante, y no rebelarse contra el sistema, eran muestras de madurez. Yo, en cambio, tenía los típico “síntomas” adolescentes: fiestas, alcohol, descontrol, revolución.
Admito que fui terriblemente irresponsable, dejando de lado muchas cosas importantes, y arrastrando conmigo a muchas personas por el “mal camino” ¿mas que puedo hacer al respecto, además de intentar cambiar a partir de ahora, y hacer lo posible por que las cosas vuelvan a ser como antes? Eso es exactamente lo que voy a hacer. Así que, ¿sin resentimientos? Sabes que sigues siendo mi mejor amiga aunque discutamos...  

2 comentarios:

  1. Graaaaacias Sofi u.u Gracias de verdad :) Vos sabés que desde 2do año que sos mi mejor amiga, y eso no va a cambiar aunque las dos seamos unas neuróticas realmente pendientes de sus chicos, MUY influenciables, MUY forras y bueno, de todo :P We both are bitchies, so what?
    Te quiero mucho :) Sabés que me tenés siempre incluyendo para contarme todo, porque al fin y al cabo me acostumbré a aquel cambio que tuviste, y un poco por tu "maduración" y otro poco por mi adaptación a la nueva Sofía Cobain, nos terminamos llevando bien :D Y pase lo que pase, aunque nos molestemos mutuamente siempre vas a ser mi mejor amiga (junto con Stefi, asi no se pone celosa :3)
    Te quiero Canuto, gracias por ser tanto ♥
    PD: Sabés que soy un abrojo, que aunque me digas que te incordio y que no deberiamos ser amigas yo soy molesta y me niego a esa posibilidad (?)

    ResponderEliminar
  2. Espero q ahora q al fin nos estamos llevando bien a Santi no se le ocurra ponernos en distintos cursos ¬¬ jajaj
    Sabés que yo también te quiero un monton, Agus, y aunque diga boludeces sin pensar -como buena Gryffindor q soy XD- la mayoría del tiempo las digo porque me enoje en el momento, no porque de verdad lo piense...
    Así q volvamos a ser las bitchies de segundo, las tres juntas, y no con tefy y shusty de mediadores XD A las merodeadoras, este año no las para nadie :P
    Un beso, Agus, y gracias por no mandarme a la mierda el año pasado, como bien podrías haber hecho...
    Nos vemos!

    ResponderEliminar